Lo que se busca con la implementación de estas comisarías móviles en los barrios se busca lograr que las mujeres y niños puedan disfruten plenamente de los espacios públicos y del lugar donde viven, sin miedo a la inseguridad.
La inseguridad ciudadana es un problema latente en nuestra ciudad, y día a día los casos de delincuencia van en aumento y no sólo nos referimos a lo delictivo, sino que también en un concepto más amplio donde tiene mucho que ver con lo que es la violencia intrafamiliar.
Con frecuencia existe la idea que la violencia es un problema de la vida pública asociado a la delincuencia y que los reductos del hogar, donde se comparte lo íntimo, son espacios protegidos, pero este enfoque debe cambiar. La fundación Jessika Borda recibe casos de toda índole desde maltrató psicológico a niños por sus padres, violencia física, violación, etc.
Es por eso frente a la grave y extendida situación de inseguridad ciudadana se trabajo juntamente con la policía y los dirigentes de los barrios para el funcionamiento de las COMIPRES.
La inseguridad y el temor frente a la posibilidad de ser agredidos, impiden que las personas disfruten plenamente de la ciudad o de su barrio el lugar donde viven. Es por eso que la instalación de las COMIPRES en lugares estratégicos y donde carece la presencia policial, ayudan a que las personas se sientan seguros.
1 comentario:
Felicidades´pr su web
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